Sí, si mantienes relaciones sexuales con una persona que tenga alguna Infección de Transmisión Sexual (ITS). Hay que tener en cuenta que la mucosa del recto es sensible y puede lacerarse con facilidad, permitiendo que microbios, virus o bacterias ingresen al organismo. De ahí la importancia de usar condones de manera correcta y en todas las relaciones sexuales.

El sexo anal no está exento de riesgos, debido a que el ano es una zona con bacterias. Además de las infecciones de transmisión sexual, puede ocasionar en los hombres infecciones en la uretra (uretritis); asimismo, pueden producirse desgarros o hemorragias, si se practica de manera brusca y no se usa lubricante.

No, a través del sexo anal no se puede quedar embarazada; sin embargo, es necesario cuidar que cuando se produzca la eyaculación no caiga semen hacia la vulva que pueda deslizarse a la entrada de la vagina.

Lo mejor, para prevenir riesgos, es siempre usar un condón en todas las relaciones sexuales.

Si todavía te queda alguna duda sobre el sexo anal , puedes dar click aquí y chatear con un especialista.

Depende de cada persona o pareja, hay algunas que las suelen tener como una práctica habitual  las relaciones sexuales anales, así como hay otras que las rechazan.

Lo importante es que esta práctica del sexo anal sea aceptada por ambos y que no sea impuesta por uno de los miembros de la pareja.

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En el caso de los hombres, en su mayoría, se ven seducidos porque el sexo anal trasciende a lo convencional.

Sin embargo, resulta atractivo no solo para hombres sino también para muchas mujeres.

Si bien el sexo anal hoy es practicado por muchas parejas, sigue teniendo esa sensación de trasgresor que motiva su práctica.

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Sí se recomienda su uso de lubricantes para la práctica de las relaciones sexuales anales, porque el ano no lubrica como la vagina.

El lubricante facilita la penetración, sin embargo, es necesario usar un lubricante a base de agua para evitar daños en el condón.

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El sexo anal puede provocar:

•  Infecciones de transmisión sexual, como el VIH/Sida, la sífilis, herpes genitales o la gonorrea, entre otras, si no se utiliza condón.
• Desgarros y lesiones, si se practica de manera brusca y no se usa lubricante.
• Mayor riesgo de infecciones urinarias en el hombre.

Se recomienda no intercambiar sexo anal con vaginal, sin que se haya producido el cambio del condón a fin de prevenir infecciones.

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